Siendo los forrajes la fuente disponible más económica para la alimentación de los rumiantes dedicados a la producción de leche y carne, se deben considerar prácticas de manejo sobre los forrajes, una serie de métodos aplicados para: sembrar, instalar, mantener, fertilizar, pastorear, control de malezas, plagas y enfermedades, y el mejoramiento de las praderas con asociaciones de leguminosas y gramíneas con una gran variedad de materiales genéticos nuevos y que día tras día las empresas productoras de semillas están mejorando, con el objetivo que sean de mayores condiciones tanto en biomasa como en calidad nutricional de las mismas.
Para alcanzar el objetivo de producción es necesario considerar y tener presente algunos factores en el manejo de las pasturas tales como: especie forrajera, tipo de suelo, topografía, tipo de explotación, tipo y fase de producción, nivel de producción esperada, extensión de la finca, carga animal, región, tecnología apropiada, clase y tipo de malezas, plagas y enfermedades, etc.
En cuanto a forrajes para la producción de leche, en la actualidad encontramos diferentes materiales de gramíneas. El pasto más utilizado en los países de mayor producción de leche es el Ryegrass, esta semilla de pasto para clima frío es nativo de Europa, Asia y norte del África, pero se cultiva en casi todo el mundo y es de las semillas que mayor mejoramiento genético presenta.
El ryegrass constituye la principal gramínea forrajera, en la producción de leche tanto por su producción, como calidad de la planta. Además, la gran ventaja está en la posibilidad de realizar varias comidas, dependiendo del material, a lo largo del año mediante cortes o pastoreo, logrando una gran capacidad productiva anualmente.
El ryegrass es una fuente de alimento ideal para el rumiante, aportando fibra, energía y proteína de forma equilibrada. Posee una alta digestibilidad y puede ser conservada mediante ensilaje.
En la actualidad encontramos tres tipos de ryegrass según el tiempo de duración de la pradera:
- RYEGRASS ANUAL: Lolium multiflorum
- Hércules
- Sansón
La principal característica del raigrás anual, es su rápido establecimiento, lo que da una alta producción en la temporada de siembra. El ryegrass anual es capaz de producir altos rendimientos de forraje en un período de tiempo corto. Son materiales de hoja ancha y tallos de porte alto, dependiendo de la fertilización y humedad del suelo en la época de establecimiento y producción forrajera.
El sistema radicular del ryegrass anual es muy superficial, lo cual lo hace sensible a las sequias. Necesita suelos fértiles donde poder mostrar todo su potencial de producción. El nitrógeno es un elemento particularmente importante para la consecución de estas elevadas producciones.
- RYEGRASS PERENNE: Lolium perenne.
- Remington
- Tetraplus - Son materiales de hoja angosta y porte bajo, con intervalos de pastoreo cortos, que genera el potencial de producir gran cantidad de biomasa de buena calidad y apetecible para el ganado, pero necesita suelos con niveles altos de fertilidad y es sensible a la sequía y al exceso de agua.
- Poseen alta persistencia, buena adaptabilidad, excelente respuesta al nitrógeno y su alta aceptabilidad por los animales. Es más digestible que otras especies forrajeras, además de tener una alta digestibilidad de la materia seca.
En resumen, tiene una elevada productividad, precocidad y calidad nutritiva.
- RYEGRASS HÍBRIDO. Lolium dibridum.
- Barsenna
- Barsilo
Son materiales que se producen a partir del ryegrass perenne y anual, ya que se forma a partir de una hibridación de ambas por fecundación libre cruzada, dando nuevos individuos de forma natural o artificial. Con este híbrido se pretende conseguir la perennidad del ryegrass perenne y el crecimiento rápido del anual.
Además, se obtiene un vigor híbrido del 10-15% mayor que los progenitores. Posee las ventajas de los dos parentales, alto rendimiento, alta calidad durante largo tiempo, persistencia y menor formación de tallos florales.
Por: Carlos Lagos, representante de ventas Nariño.